"¿Qué sería de tu escritura sin tu odio patriarcal?", me preguntó no hace mucho un compañero de mi grupo de escritura. Me lo preguntó como pretendiendo que sus palabras no escondían una violencia machista. Pero todos al mi alrededor podían ver el significado oculto de lo que él acababa de decir: "Si no existiera el patriarcado, ¿tus escritos serían igual de buenos?". Me lo preguntó, claro, después de que mis compañeros votaran mi texto como favorito en un contexto de competencia, y oh, sorpresa, después de que su texto no recibiera ningún voto. Querido compañero, dejame decirte que yo no tengo una respuesta para tu pregunta, y es probable que nunca la tenga. Nací en una sociedad rodeada de hombres que creían merecer más que yo solo por ser hombres. Hombres como vos. Hombres que buscan todo el tiempo disminuir las voces de las mujeres. Hombres que buscan sepultar los méritos de sus "rivales femeninas" cuando se ven disminuidos en su propio ego. Y está a la vista que tu ego se vio muy disminuido cuando nadie votó tu texto. Pero como no podías soportar que el hecho de que nadie hubiera votado tu escrito fuera porque no era bueno, decidiste apuntarme con tu arma más floja. Quisiste dejarme en evidencia, pero (¿para mi suerte?), lograste exactamente el efecto contrario: te dejaste en evidencia a vos mismo. Dejaste en evidencia que querías culpar a otra persona por las fallas de tu escritura. Y ahora yo te pregunto a vos: ¿qué sería de tu escritura si no echaras la culpa de tus propios fallos a los demás? Hay una edad en la que tenemos que dejar de buscar culpables y empezar a hacernos cargo de nuestras acciones, y dejame decirte que ya hace mucho tiempo que ambos alcanzamos esa edad. Hoy llego hasta acá. Hoy no me defiendo más. Mi odio patriarcal y yo estamos muy ocupados escribiendo como para detenernos en nimiedades. Y ahora nos vamos los cuatro (sí, mi birome y mi cuaderno también vienen con nosotros) a seguir buscando un lugar para expresarnos libremente. A buscar un lugar donde nuestras palabras puedan ser sin temor a ser juzgadas por los mismos hombres que generan ese "odio patriarcal".
Y a vos, lector, que leíste esta entrada hasta el final, te invito a ver mi video en el que hablo sobre el libro Cómo acabar con la escritura de las mujeres de Joanna Russ. Te espero en mi canal de YouTube♥
Foto de Markus Winkler en Unsplash
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